Psicología: tratado de la mente

Psicología (del griego clásico, psique, alma, actividad mental y logía, tratado, estudio). Esta disciplina se ocupa, básicamente, de tres procesos: La cognición: se refiere al pensamiento. No sólo a las ideas conscientes, si no que ha de entenderse también como la manera que tenemos de comprender el mundo, de reflexionar y de entender nuestra propia existencia. Este es un resumen escueto sobre el amplio significado de este concepto, sin embargo, nos ayudará a entender a qué se refieren los psicólogos cuando hablan por ejemplo de procesos cognitivos. Las emociones: se refiere a los estados afectivos que experimentamos como resultado de un estímulo, ya sea externo (que está provocado por alguien o algo distinto a nosotros) o interno (la evocación de un recuerdo, un pensamiento, una imagen, etc.). Estos estados afectivos se traducen a nivel orgánico en cambios fisiológicos y endocrinos. La conducta: se refiere al comportamiento, en concreto,del comportamiento que un sujeto mantiene ante el medio. Así, resolver un problema matemático, también puede entenderse como una conducta, aunque implique también alguno de los procesos antes mencionados. El psicólogo se ocupa de analizar estos procesos teniendo en cuenta que aparecen en la persona de forma interrelacionada, es decir, cuando se produce una emoción, esta está vinculada a un pensamiento y esto provoca una reacción más o menos visible que podemos calificar como conducta. De la misma forma este proceso puede darse en otros formas, por ejemplo en el caso de que tengamos un pensamiento negativo que suscita en nosotros una emoción y que como consecuencia, la persona reacciona ante este estímulo inerno o bien que sea nuestra forma de comportarnos la que nos haga sentir una serie de emociones y como consecuencia construimos una idea acerca de lo que nos ocurre. En resumen, cognición, emoción y conducta, están estrechamente relacionadas, van de la mano. Y aunque se haya explicado este proceso de forma lineal, para que pueda entenderse dicho proceso, este esquema es complejo y no podemos decir si es la emoción la que produce el pensamiento y la conducta, o si se produce de cualquier otra forma ya que estos procesos se ven entremezclados e influidos entre ellos de la misma forma que el color blanco aparece como color blanco, aunque este sea la suma de todos los colores. Cuando una persona sufre, ya sea por un hecho objetivo o subjetivo, es importante conocer cómo piensa, cómo siente y cómo es su conducta, trabajando sobre estos conceptos sin olvidar nunca que la suma de ellos es un todo De esta forma aprendemos cuál es su manera de funcionar, para que, llegado el caso, podamos saber si esa forma de funcionar está interfiriendo en el bienestar de esa persona. En definitiva, de eso se trata, de funcionar en el mundo siendo serenamente felices y dejando que los demás también lo sean.