Toda meta que nos planteamos tiene como objetivo conseguir algo. Aunque tener un objetivo, un reto o una ilusión ya nos ayuda a redirigir nuestro camino hacia donde queremos llevarlo, es necesario estar equipado de ciertas pautas para evitar que toda nuestra energía no se quede al principio del camino y se vaya dispamdo con el tiempo hasta abandonar nuestro propósito. Por ello os presentemos una serie de proposiciones para que generar esa fuerza de voluntad que va más allá de una "fuerza de arranque ":
- Nadie es perfecto: seria absurdo pensar que todo cuanto hagamos será espléndido desde el primer momento. Todos necesitamos equivocarnos y corregir. Eso es lo que nos hace mejorar.
- Surgirán problemas. Aunque hagamos las cosas de forma correcta y seamos muy disciplinados, no estamos solos en el mundo. Surgirán problemas porque en la vida nos cruzamos con otras vidas, con otras necesidades, con normas que hay que respetar, con imprevistos, etc. Si el hecho de tener un propósito nos allanara el camino de manera que, sólo por el hecho de luchar por algo se obtuviera... Nadie tendría miedo de perseguir un sueño y entonces no necesitaríamos fuerza de voluntad puesto que no hay dificultades. Lo importante, lo más importante es cómo nos vamos a relacionar con los problemas que se nos planteen: dejamos que nos bloqueen o buscamos una solución y soportamos ese malestar?
- Perdónate. Todo el muno comente errores y a veces hemos podido ser egoístas, haber hecho daño, o no haber hecho lo suficiente. Todos los seres humanos pasamos por esto alguna vez. Porque no somos perfectos y porque es nuestra forma dde aprender. Sentirte culpable por algo no va a cambiar las cosas. Te bloqueará e impedirá que avances y nadie saldrá beneficiado de esa emoción. Eres lo que haces cada día. Quieres ser mejor? Haz algo distinto. Pero no puedes ser dos cosas a la vez, así que déja de ser culpable para ser libre y mejor.
-Siempre es más fácil de lo que pensábamos. Hay dos momentos difíciles en el camino del propósito: empezar y continuar. Por ello es necesario describir qué cosas necesitamos hacer para llegar a dónde queremos. Una vez lo sepamos debemos elegir el primer paso (siempre será el más fácil) y empezar a realizarlo sin pensarlo dos veces. Una vez estemos realizando los primeros pasos, es importante disfrutar de ellos. No pienses sólo en el final de la meta. Eso llegará, es sólo cuestión de tiempo. Fíjate en todo lo que aprendes en el camino.
-La excepción no es una regla. A veces surgen imprevistos que nos impiden hacer lo que es necesario para seguir nuestro camino, desde ponernos enfermos a disfrutar de unas vacaciones. Ya habíamos previsto que surgirían pequeños obstáculos en el camino. Cuando uno sube una montaña, buscará momentos para descansar y evitar el agotamiento. Pero no puede quedarse siempre descansando o estará para siempre en mtad de la montaña, perdido. Si surge un imprevisto resuélvelo y vuelve a tomar las riendas de tu vida, una y otra vez, todas las que hagan falta. Se trata de tu vida!
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