martes, 12 de marzo de 2013

EMPATÍA

La emaptía es la capacidad de entender las emociones y pensamientos de los demás, es "saber ponerse en el lugar del otro".
Todos tenemos capacidad empática en menor o mayor grado, (aunque pueden haber casos en las que haya falta casi absoluta de empatía, pero estaríamos hablando de ciertas patologías que no trataremos en el artículo de hoy). 
La emaptía se desarrolla en la infancia, cuando el niño aprende mediante modelos de su entorno a expresar los sentimientos y a preocuparse por los demás.
Cuando  se consuela a un niño que está llorando, cuando se expresan los sentimientos, cuando le enseñamos que, ciertas actitudes pueden dañar a los demás y le invitamos a que se identifique con las personas, en esos momentos estamos enseñando empatía.
Sin embargo, hay padres que no saben mostrar afecto ni expresar sentimientos (aunque esto no quiere decir que no los tengan) de manera que los hijos no aprenden a expresar emociones propias y de esta forma les resultará muy difícil interpretar las ajenas.

Cuando crecemos sin haber desarrollado está capacidad, tendemos a esconder los sentimientos porque no conocemos otra manera de gestionar nuestras emociones y nos resulta extraño que alguien las exprese de forma directa. Se puede desarrollar la creencia de que explicar cómo nos sentimos nos hace débiles, no nos sirve para avanzar, es una pérdida de tiempo, es una excusa para no enfrentarnos a los problemas o incluso que es ridículo. Por ello es fácil que, cuando alguien nos expresa una emoción, nos sintamos incómodos o tratemos de corregir su comportamiento sin darle margen a la persona para que sienta esa emoción.
Con el paso del tiempo, sino se trabaja el desarrollo de la empatía, aparecemos como personas frías ante los ojos de los demás y, es más, tendemos a restarle importancia a nuestros sentimientos, racionalizándolos en exceso para evitar expresar cómo nos sentimos.
La comunicación emocional es la base de unas relaciones sanas, porque nos permiten entender y respetar las necesidades sentimentales del otro, permitiendo una mayor y más fluída comunicación, lo que nos llevará a comprender mejor las necesidades del otro y las nuestras.
  


Si te gustan los artículos, no olvides dejar tu comentario, nos ayuda a seguir publicando

3 comentarios:

  1. No solemos actuar contra nuestras personas queridas (a no ser que seamos unos hijos de ...), ¿no es la empatía lo que evita tomemos decisiones egoístas que perjudicarían a otros aunque no los conozcamos?

    La empatía es también lo que nos permite comprender el sufrimiento de los demás y las consecuencias de los actos. La falta de empatía no sólo nos aísla, también favorece los comportamientos egoístas y crueles.

    Sin empatía no hay animal social, y la falta de ella no trae nada bueno (y las máquinas no pueden enseñarla).

    srj

    ResponderEliminar
  2. Gracias por compartir tu opinión con nosotros! Ciertamente, sin empatía, no seríamos animales sociales, ni gregarios tampoco probablemente, cualidades que nos han permitido evolucionar,y sobrevivir, así que la empatía es un ingrediente esencial para muchos seres vivos, pues como bien dices, sin ella, nuestros objetivos pasarían por encima de cualquier precio. La empatía nos une para que podamos evolucionar conjuntamente en lugar de convertirnos en depredadores de nuestra propia especie.

    ResponderEliminar
  3. Gracias por compartir tu opinión con nosotros! Ciertamente, sin empatía, no seríamos animales sociales, ni gregarios tampoco probablemente, cualidades que nos han permitido evolucionar,y sobrevivir, así que la empatía es un ingrediente esencial para muchos seres vivos, pues como bien dices, sin ella, nuestros objetivos pasarían por encima de cualquier precio. La empatía nos une para que podamos evolucionar conjuntamente en lugar de convertirnos en depredadores de nuestra propia especie.

    ResponderEliminar